Sin embargo, la realidad era que un par de monjas despilfarraron una cantidad de hasta medio millón de dólares en viajes y casinos. Resulta irónico que unas monjas que llevan vidas austeras hayan acabado derrochando de esta manera. Sin embargo, queda claro que el juego tiene mucha atracción y puede enganchar a cualquiera. Siempre se recomienda el juego responsable a todos los usuarios tanto de casinos y operadores de apuestas como de casinos online.
La Sombra De La Sospecha
Una auditoría rutinaria creó suspicacias sobre las hermanas Kreuper y Chang. Ambas se jubilaron en 2018, justo después de que empezaran las investigaciones sobre los fondos de la institución. Debido a comportamientos inusuales, como excesivo nerviosismo y cambio de registros, los superiores optaron por solicitar un estudio más profundo.
Un investigador independiente encontró una cuenta bancaria de la escuela de la que solo las dos hermanas tenían constancia. Durante más de una década, se desviaron cheques, donaciones y fondos a dicha cuenta. Solo ambas hermanas tenían acceso a ese dinero sin el conocimiento de sus compañeros de trabajo.
Medidas Legales
La institución no ha presentado cargos contra las hermanas, quienes expresaron su arrepentimiento. A pesar de que han ofrecido devolver el dinero, hay padres de familia que están considerando llevar el caso a los tribunales. Este escándalo ha levantado mucho revuelo entre las personas que han apoyado a la institución durante años mediante donativos y contribuciones.
Todas estas personas se sienten engañadas y con motivo de causa. Por este motivo, la asociación de padres de St. James está deliberando sobre las medidas legales que pueden tomar como represalias. Consideran que las disculpas de las monjas no son suficientes para reparar el daño causado en la institución durante todos estos años. No solo se trata de un asunto monetario, sino que la credibilidad de la comunidad ha quedado en entre juicio.
Llevando El Juego A Otro Nivel
¿Qué es lo que llevó a estas dos monjas a realizar este engaño? Tal vez lo que empezó como un juego se fue de control y nunca se dieron cuenta de lo lejos que habían llegado. Es posible que no se percataran de las grandes sumas de dinero que estaban destinando a estos fines ya que no era su dinero. Es decir, ellas hacían uso personal de un capital que se había entregado a la institución.
La cifra malversada podría ser superior, ya que no es posible rastrear todas las transacciones en efectivo. El escándalo se remonta a más de una década según las últimas investigaciones de lo auditores independientes sobre el caso
Imagen De La Institución
St. James debe enfrentarse a un lavado de imagen para recuperar la confianza en sus seguidores. Los padres de familia de la escuela no deben olvidar que hay ovejas negras (igual que la máquina tragaperras de lo casinos, Blacksheep, ¡menuda ironía!) en todos los rebaños y que los demás trabajadores no tenían idea de lo que pasaba. Después de todo, ¡quién iba a imaginar que dos monjas eran apostadoras empedernidas!
En cualquier caso, se deberían implementar medidas para evitar que casos similares se repitan en el futuro. Además, sería adecuado valorar si las monjas se movieron por adicción al juego. Solo queda ver cómo evolucionará este caso, ¿será que ambas monjas acabarán consiguiendo el perdón de la comunidad? Habrá que esperar a verlo en futuras noticias.
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