La autopsia practicada a la vecina del barrio vallisoletano de Pajarillos, muerta la pasada madrugada al precipitarse por la ventana de su domicilio, no revelan lesiones de una posible agresión por parte de su marido, que se encuentra detenido, salvo las lógicas derivadas del impacto de su cuerpo con el asfalto producto de la caída.
El marido, aún en los calabozos de la Comisaría de Las Delicias, ha sido interrogado esta tarde y no será puesto a disposición judicial hasta este martes. Está pendiente el análisis toxicológico, según informan fuentes de la Policía Nacional a través de un comunicado recogido por Europa Press.
La muerte de la mujer, de 56 años, se produjo sobre las 02.25 horas de cuando, en circunstancias que aún se investigan, cayó a la calle desde una ventana de su domicilio, un 3º sito en la calle Alcotán del barrio de Pajarillos, tras, presuntamente, una violenta discusión con su pareja, de 45 años.
Vecinos del edificio, tal y como apuntó Europa Press y que ha sido confirmado ahora por la policía, al ver colgando de la ventana a la mujer sujeta por su marido llegaron a tratar de auxiliarla colocando varios colchones a pie de calle, si bien dicha maniobra no fue suficiente y no evitó el impacto de su cuerpo con el asfalto.
El subdelegado del Gobierno en Valladolid, Emilio Álvarez Villazán, se ha mostrado cauto a la hora de analizar lo ocurrido y ha preferido analizar la detención del esposo en clave de posible homicidio, en lugar de por indicios de violencia de género.
"Ha sido detenido por indicios de violencia de género porque era la única persona que había en ese momento en el piso", ha indicado Emilio Álvarez, quien insiste en que en estos momentos "no hay ningún dato que permita afirmar que ha sido un caso de violencia de género", al tiempo que reitera que, según su opinión, lo más acertado a esta hora es referirse al caso como un presunto homicidio.
SIN DENUNCIAS ENTRE LA PAREJA
Lo que sí ha asegurado el subdelegado es que no había denuncias previas entre el matrimonio por violencia de género y que ambos tenían antecedentes por agresión a la Policía Local, hechos ocurridos en 2019.
Sí consta una denuncia por violencia doméstica contra el marido pero interpuesta por uno de los hijos de la víctima, que no vivían con la pareja en el domicilio conyugal. Se trata de una denuncia por supuesta agresión del ahora detenido sobre su hijo, aunque la misma se encuentra sobreseída, por lo que Álvarez presupone que data de hace más de cinco años.
También ha explicado el subdelegado que vecinos del inmueble atestiguan que las discusiones entre el matrimonio eran "frecuentes y muy fuertes".