El mes de junio fue el sexto mes del año más caluroso registrado en la historia y el decimotercer mes consecutivo en establecer un récord de temperatura mensual, informó este lunes la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Los datos del Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea revelaron que la temperatura global promedio ha estado 1,5°C por encima del nivel preindustrial durante doce meses consecutivos, pese a que ese aumento marca la meta del Acuerdo de París para fin de siglo.
Además, la temperatura media de la superficie del mar se ubicó en junio en 20,85°C, el valor más alto documentado para el mes.
La secretaria general de la OMM destacó que esta nueva información muestra que se superará el nivel de 1,5°C de forma temporal y con una frecuencia cada vez mayor mensualmente.
“Sin embargo, es importante subrayar que los incumplimientos temporales no significan que el objetivo de 1,5 °C se pierda permanentemente porque esa meta se refiere a un calentamiento a largo plazo durante al menos dos décadas”, añadió Celeste Saulo.
El Acuerdo de París compromete a los países a mantener la temperatura media de la superficie mundial a largo plazo muy por debajo de los 2 °C con respecto a los niveles preindustriales y proseguir esfuerzos para limitarla a 1,5 °C para finales de este siglo.
La comunidad científica ha advertido repetidamente que un calentamiento de más de 1,5°C daría lugar a condiciones climáticas extremas mucho más graves.
Con los niveles actuales de calentamiento ya se observan efectos devastadores como olas de calor y precipitaciones extremas, sequías, reducciones de las capas de hielo marino y glaciares, aceleración del aumento del nivel del mar y calentamiento de los océanos.
“En junio se produjeron olas de calor generalizadas y prolongadas en muchos países, con importantes repercusiones en todos los aspectos de la vida de las personas”, dijo Celeste Saulo, y alertó de calor más extremo a medida que avance el verano boreal.
Del mismo modo se refirió con gran preocupación a las temperaturas récord de la superficie del mar, que amenazan los ecosistemas marinos vitales y proporcionan energía para potenciar los ciclones tropicales, como en el caso del huracán Beryl.
El director del Servicio de Cambio Climático de Copernicus, por su parte, señaló que aún si terminara esta racha específica de extremos, se seguirán batiendo récords mientras el clima siga calentándose.
“Esto es inevitable, a menos que dejemos de añadir gases de efecto invernadero a la atmósfera y los océanos”, enfatizó Carlo Buontempo.