Fue la propia pequeña la que, por su propio pie, decidió ir a casa de un compañero de clase junto con otra amiga. Sin embargo, los padres del joven no estaban, y en el domicilio se encontraban otros dos chicos.
Una vez dentro de la vivienda, la niña de 12 años fue llevada y encerrada a una habitación donde, al parecer, fue violada por los tres jóvenes. Además de abusar sexualmente de ella, todos grabaron la escena con sus teléfonos móviles.
Al escuchar los gritos, la amiga que había acompañado a la pequeña a la vivienda acudió a la casa de ésta para advertir a su familia de que estaba siendo violada.
Tras enterarse de los hechos, ésta acudió corriendo a la casa para rescatar a su hija e intentar atrapar a los agresores, aunque no pudo porque escaparon en diferentes direcciones.
La Policía detuvo horas más tade a uno de los artífices de la agresión, mientras que los otros dos autores de la violación, de 14 y 15 años, siguen en búsqueda.
La pequeña fue trasladada al hospital SAMIC, en donde se le realizó el protocolo habitual para casos de agresiones.
Además, tanto ella como su familia, recibieron asistencia psicológica.