Agentes de la Guardia Civil se encuentran investigando a una familia de Peñafiel, en Valladolid, que podría haber prostituido a una de sus hijas, de solo 10 años de edad.
La denuncia corrió a cargo de una trabajadora social, ya que existía la sospecha en el colegio de la menor de que la niña podría haber sido obligada a prostituirse.
La denuncia fue puesta en el Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid, que ordenó sacar a la niña del domicilio en la localidad de Peñafiel, donde vive con sus padres, hermanos, tío y primos y llevarla, para su acogida, a un centro de menores hasta esclarecer si los hechos son ciertos.
Tan y como han informado las autoridades locales, la Guardia Civil se personó en la vivienda familiar la semana pasada para llevarse a la menor y tomar declaración a algunos familiares.
Por su parte, la familia ha negado los hechos denunciados, pero la investigación sigue abierta con más testificales y la práctica de otras pruebas, entre ellas la psicológica y forense sobre la supuesta víctima.