El procesado es reincidente ya que cuenta con una condena por sentencia firme por dos delitos de maltrato sobre la misma víctima dictada por un juzgado de Violencia sobre la Mujer.
La Guardia Civil, en el marco de la operación ‘Skianet’, ha detenido a un varón de 18 años que distribuía material pedófilo a través de un grupo de mensajería con más de 1.800 miembros por diez presuntos delitos de creación y distribución de pornografía infantil, contra la integridad moral y libertad sexual.
El detenido trabajaba en un parque infantil cuando presuntamente abusó de una menor de edad. Le constaba una Orden Europea de Detención y Entrega emitida por Bélgica y se enfrenta a una condena firme de dos años de prisión.
Los detenidos ocultaban los fondos resultantes del blanqueo de capitales mediante la actividad principal de reparación y mantenimiento de embarcaciones náuticas. Se les imputan los delitos de blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal, acumulados a los delitos contra la salud pública por los que ya fueron detenidos en su día.
Se encontraba fugado desde el 2017 tras disparar a un joven por pertenecer a una banda rival en la puerta de una discoteca madrileña y le constaba una Orden Europea de Detención y Entrega.
El tribunal considera al hombre autor de un delito continuado de abuso sexual con acceso carnal a menor de 16 años y a ella cooperadora necesaria de ese delito ya que “era plenamente conocedora de los hechos, los consentía y no hizo nada por impedirlos”.
Las dos menores acudieron a su orientadora indicando que tenían miedo de volver a su domicilio, ya que decían ser maltratadas. Una de ellas iba a ser enviada a un país del Este para ser casada contra su voluntad.
Se dedicaba presuntamente al tráfico ilícito de drogas, tráfico ilícito de armas y explosivos y pertenencia a organización criminal. El detenido había obtenido una identidad falsa para eludir a las autoridades policiales y utilizaba fuertes medidas de seguridad para evitar ser localizado.
Los miembros de esta red compraban en China el material necesario para la producción de metanfetamina y, posteriormente, la elaboraban en laboratorios propios situados en territorio europeo. Por estos hechos se enfrenta a una pena de hasta quince años de prisión.
El detenido, sobre el que pesaba una Orden Internacional de Detención (OID), fue localizado como resultado de la investigación realizada por el grupo de trabajo creado ad hoc por la Policía Nacional para evitar la implantación de esta organización criminal en España.
|