Las víctimas, principalmente mujeres latinoamericanas en situaciones muy precarias, eran captadas en sus países de origen bajo falsas ofertas de empleo y, finalmente, eran explotadas sexual y laboralmente en clubes de alterne. La operación -en la que han participado más de 100 agentes- ha finalizado con el registro de cinco domicilios y dos clubes de alterne en Murcia; en ellos se han intervenido 100.000 euros en efectivo, siete vehículos, un arma de fuego simulada, numerosas armas blancas y sustancias estupefacientes.
La investigación policial se inició cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de varios clubes de alterne, ubicados en los municipios de Cartagena y Murcia, en los que presuntamente estaban explotando sexualmente a mujeres latinoamericanas. Después de meses de intensa investigación, los agentes constataron la existencia de una organización criminal, liderada por un conocido y peligroso clan familiar, que explotaba sexual y laboralmente a mujeres en diferentes clubes de alterne de su propiedad. Además, observaron que los investigados extendían su actividad ilícita al tráfico de drogas.
Desde Venezuela y Colombia
Las víctimas de la organización eran mujeres que se encontraban en situaciones muy precarias en sus países de origen, Venezuela y Colombia principalmente. Los explotadores las captaban con falsas ofertas de trabajo en España y se hacían cargo de todos los gastos que generaba su desplazamiento hasta la península.
El mismo día de su llegada, las trasladaban a los clubes de alterne -propiedad de la organización- donde eran informadas de que debían ejercer la prostitución para pagar la deuda contraída. Todo ello bajo un estricto control y un amplio régimen de sanciones.
Estrategia “low cost”
La deuda que la organización imponía a las mujeres era superior al coste real del traslado. No obstante, y en comparación con otras redes criminales que desarrollan esta actividad ilícita, el valor de la deuda no era especialmente elevado, ya que la estrategia de obtención de beneficios de la organización se basaba más en el volumen de mujeres captadas que en el beneficio adquirido con cada una de ellas.
La operación finalizó con la liberación de 19 mujeres y la detención de 20 miembros de la organización -19 en la Región de Murcia y 1 en Zaragoza-. Además, los agentes registraron cinco domicilios y dos clubes de alterne en Murcia. En ellos intervinieron 100.000 euros en efectivo, siete vehículos, un arma de fuego simulada, numerosas armas blancas, sustancias estupefacientes y múltiples dispositivos electrónicos.