Ésta es una de las conclusiones que se extraen del estudio 'Reincidentes viales: un peligro para todos. Análisis y evolución 2009-2018', elaborado por la Fundación Línea Directa y presentado este lunes en una rueda de prensa 'online', por el director general de esta entidad, Francisco Valencia.
El estudio se basa en datos de conductores de la Dirección General de Tráfico (DGT), condenas por delitos contra la seguridad vial recabadas por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias y una encuesta realizada por la Fundación Línea Directa a más de 1.700 conductores entre los pasados 12 y 18 de junio.
Valencia apuntó que, aunque las cifras de siniestralidad vial han descendido en los últimos años debido al permiso por puntos y a una reforma del Código Penal que permite ingresar en prisión a los conductores que cometen infracciones graves o muy graves contra la seguridad vial, hay "un problema de fondo, cronificado y altamente peligroso" con los que reinciden en conductas peligrosas al volante, que en realidad son muchos más de los que son sancionados y figuran en las estadísticas oficiales.
Así, cerca de 570.000 conductores en España reincidieron en infracciones graves o muy graves (unos 45.000 al año desde 2015) y unos 273.000 perdieron la vigencia del carné de conducir en la última década.
Sin embargo, la encuesta de la Fundación Línea Directa indica que el 55% de los conductores españoles (unos 15 millones) confiesa que ha cometido más de una conducta de alto riesgo al volante en el último año. Las regiones con más conductores de ese tipo son Castilla y León, Asturias y Comunidad Valenciana, y las menos, Andalucía, Murcia y Baleares.
PERFIL
El perfil del conductor reincidente es el de un hombre, de 30 a 49 años, con más de 10 años de experiencia al volante y mayoritariamente sancionado por exceso de velocidad. Y el de quien pierde el carné es el de un hombre, de 19 a 29 años y con más de 10 años desde que se sacó el permiso de conducir.
Además, la encuesta muestra que un 43% de los conductores (12 millones) reconoce que circula con exceso de velocidad de forma reiterada; un 26% no respeta la distancia de seguridad con el vehículo precedente (7 millones); un 14% circula hablando por el móvil (3,7 millones); un 1,3% (355.000) conduce bajo tras un consumo elevado de alcohol y drogas, y el 60% (16 millones) ha sido testigo o ha sufrido alguna imprudencia en materia de seguridad vial.
A ello se le une un desconocimiento sobre los delitos y las sanciones porque el 65% no sabe cuáles son los límites de velocidad delictivos (60 km/h más en vía urbana y 80 km/h en interurbana), ocho de cada 10 ignora la tasa de alcohol no permitida (0,60 mg/l en aire espirado) y el 65% desconoce cuál es la sanción por hablar indebidamente por el teléfono móvil (cuatro puntos y 500 euros).
Además de la pérdida del carné, las infracciones de tráfico pueden llevar a la cárcel, puesto que actualmente hay en prisión 952 personas por delinquir contra la seguridad vial.
Por último, Valencia vislumbró un "verano negro" en las carreteras, después de que la mortalidad haya aumentado un 22% tras el estado de alarma, según datos de la DGT, y apeló a la responsabilidad de los conductores para evitar un repunte estival en los accidentes de tráfico.