Berta Cáceres, cofundadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) fue asesinada por liderar una campaña para impedir la construcción de una presa hidroeléctrica con financiación internacional en un río sagrado para su pueblo lenca. Siete personas fueron declaradas culpables y condenadas el 2 de diciembre de 2019 por su asesinato.
Sin embargo, y a pesar de la contundencia de las pruebas, la justicia hondureña aún no ha procesado a la familia Atala Zablah, autores intelectuales del crimen y dueños de la empresa DESA.
Solo una persona, David Castillo Mejía, gerente de la empresa Desarrollos Energéticos (DESA), está acusada, hasta ahora, de ser «autor intelectual» de su asesinato, a pesar de que un
informe del Grupo Asesor Internacional de Expertos (GAIPE) señala a otras personas.
Con motivo del quinto aniversario de su asesinado, organizaciones ambientales y sociales, entre las que se encuentra Amigos de la Tierra, han enviado una
carta a Arancha González Laya, ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación para instarle a que continúe dando seguimiento a la lucha por la verdad y la justicia en el caso de la reconocida defensora de los derechos humanos de los pueblos indígenas, Berta Cáceres.
En la carta le piden, como Ministra de Asuntos Exteriores y Cooperación, que continúe destacando su preocupación ante las autoridades hondureñas para que estas garanticen los estándares del debido proceso legal en vista de la apertura del juicio público contra David Castillo por su presunta participación en el asesinato de Berta Cáceres.
Además, se ha enviado otra
carta a Norman García Paz, embajador de Honduras en España, instando a su país a que se respeten plenamente las garantías del debido proceso legal y a que se lleve a cabo una investigación imparcial e independiente.
El país más peligroso del mundo para defensores del medio ambiente Honduras es el país más peligroso del mundo para las personas defensoras de la tierra y el medio ambiente. Según el
último informe de Global Witness, Honduras tiene la mayor tasa per cápita de asesinatos de estos defensores y defensoras en el mundo. La falta de identificación y acusación de todas las personas responsables del asesinato de Berta Cáceres pone en peligro a otros defensores y defensoras y deja impunes a quienes son responsables del crimen.
Desde Amigos de la Tierra, muestran su solidaridad y dudican su lucha para que defender la tierra y nuestros derechos no sea un delito, “aquí, ni en ninguna parte del mundo”.