La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a 22 años de prisión a un hombre que provocó un incendio en un edificio en el que murió un niño de tres años y resultaron heridos la madre y los dos hermanos de ese menor.
La sentencia, dictada a partir del veredicto de culpabilidad emitido por un jurado popular el pasado 6 de julio, declara al acusado autor de un delito de incendio con peligro para la vida e integridad de las personas en concurso ideal con un delito de homicidio y tres delitos de lesiones.
El condenado deberá ahora pagar indemnizaciones por un importe total cercano a los 375.000 euros por el fallecimiento del pequeño y las lesiones y secuelas que sufrieron el resto de las víctimas.
La magistrada que presidió este juicio descarta imponer la pena de prisión permanente revisable, como solicitaban la Fiscalía y la acusación particular, al considerar que el reo incurrió en un delito de homicidio y no de asesinato, como sostenían ambas partes, al causar la muerte del menor.
Los hechos, tal y como declaró probado el jurado, sucedieron el 10 de diciembre de 2020, cuando el acusado se desplazó desde la localidad murciana de San Javier a Valencia y se dirigió al edificio de cinco plantas del barrio de La Malvarrosa donde pensaba que seguía viviendo su expareja, quien se había mudado no obstante con anterioridad a otra localidad.
Al no lograr verla ni poder hablar con ella, sobre las 19 horas, “decidido a vengarse” de su excompañera -tal y como recoge la sentencia- se introdujo en la finca, subió a la planta cuarta y prendió fuego a un sofá, unos muebles y unos enseres que estaban apilados junto a la puerta del piso donde creía que ella seguía residiendo.
Esa acción provocó un incendio de grandes dimensiones y generó una importante humareda que alcanzó la planta superior del edificio, donde vivían una mujer con sus tres hijos menores de edad.
Esta vecina trató de ponerse a salvo con los niños -de tres, siete y nueve años de edad, respectivamente- bajando las escaleras hacia la cuarta planta, pero no pudo continuar por el humo y las llamas.
El más pequeño de los niños falleció asfixiado por la inhalación de humo, mientras que su madre y sus dos hermanos resultaron heridos por la propia intoxicación y por quemaduras.
La sentencia dictada ahora por la Sección Primera de la Audiencia de Valencia no es firme y puede ser recurrida en apelación ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.