Sibèria, Alaska y el noroeste de Canadá se han convertido en el foco de atención debido a un reciente estudio que identifica puntos críticos de calentamiento cerca del Ártico. Esta investigación, en la que ha participado la investigadora postdoctoral Beatriu de Pinós del departamento de Ciencia y Ingeniería Forestal y Agrícola de la Universitat de Lleida (UdL), ha sido publicada en la revista Geophysical Research Letters.
El estudio, liderado por el Woodwell Climate Research Center en Estados Unidos, también contó con la colaboración de investigadores de la Universidad de los Emiratos Árabes (Abu Dhabi) y la Universidad de Oslo (Noruega). Los hallazgos revelan que muchas de las áreas más afectadas por el cambio climático contienen permafrost, un tipo de suelo que permanece congelado todo el año y que es especialmente vulnerable al deshielo a medida que las temperaturas aumentan.
Puntos críticos bajo análisis
La investigación proporciona una visión amplia sobre los ecosistemas ártico-boreales, que están experimentando algunos de los cambios climáticos más rápidos y extremos del planeta. Para identificar estos «puntos críticos», los investigadores utilizaron más de 30 años de datos geoespaciales y registros históricos de temperatura. Este análisis permitió evaluar los indicadores de vulnerabilidad ecológica en tres categorías: temperatura, humedad y vegetación.
Jennifer Watts, primera autora del estudio y directora del programa Ártico en Woodwell Climate, subraya la importancia de detectar estos puntos críticos a nivel local y regional. “Esto no solo nos ayuda a construir una imagen más precisa sobre cómo el calentamiento del Ártico está impactando los ecosistemas, sino también a identificar lugares donde realmente necesitamos concentrar nuestros esfuerzos de monitoreo y recursos para la gestión futura”, afirma Watts.
Riesgos ambientales crecientes
Las regiones boscosas analizadas han desempeñado un papel crucial en la absorción y almacenamiento del dióxido de carbono; sin embargo, ahora enfrentan importantes tensiones climáticas. “Estamos viendo un riesgo creciente de incendios”, advierte Watts, lo que pone en evidencia la urgencia por abordar estas problemáticas ambientales antes que sea demasiado tarde.