La muerte del niño de 8 años, que falleció el pasado miércoles en Elda después de que dos hombres lo abordaran en el rellano de la escalera junto a la novia de su padre, sigue despertando muchas incógnitas.
Las primeras conclusiones del resultado de una autopsia, que no es concluyente respecto a la causa de la muerte, apuntan a una posible asfixia, descartando que el pequeño falleciera por un ataque de epilepsia, enfermedad que padecía y que hasta la fecha nunca le había causado ninguna complicación.
Por el momento se han enviado muestras biológicas del menor al Instituto Nacional de Toxicología para que los expertos las analicen y puedan determinar con mayor exactitud las causas del fallecimiento.
La Policía tiene abiertas varias líneas de investigación y mantienen en el punto de mira a los allegados del padre de acogida y de la novia de éste -una mujer de 30 años embarazada a la que golpearon en el ataque- y también a la familia biológica del pequeño.
Y es que el exnovio de la joven agredida tiene antecedentes penales por tráfico de drogas y por alteración del orden público, entre otros, por lo que la Policía ha puesto su foco de atención en él.
¿Un ajuste de cuentas?
Una de las líneas de investigación que se está siguiendo es si el ataque era una aviso para él y utilizaron a su exnovia para asustarlo. Cabe recordar que el hombre se había ido de Elda hacía meses y quien quisiera darle un escarmiento únicamente podía hacerlo con la persona con la que una vez tuvo un vínculo sentimental.
No obstante, el hecho de que el niño estuviera con ella pudo ser algo con lo que no contaran los agresores, dos hombres que ocultaban su rostro con cascos de motoristas según ha dado a conocer la Policía.
¿Qué pasó con el pequeño en el asalto?
Por ahora se sabe que el asalto se produjo alrededor de las nueve de la noche en el rellano de la vivienda donde residían el padre adoptivo del pequeño y su novia.
Fue cuando la mujer salió de la casa junto al niño cuando dos hombres les abordaron sin apenas darles tiempo a reaccionar. Mientras que a ella la golpearon y la ataron a una silla con una bolsa en la cabeza, lo que ocurrió con el pequeño es todavía una incógnita.
Los asaltantes huyeron precipitadamente después de que una vecina alertara a la Policía tras escuchar los gritos del menor. Sin embargo, cuando los agentes llegaron, ya no pudieron hacer nada por salvar su vida.
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