Los testigos de este escalofriante suceso no olvidarán nunca la tarde del pasado domingo. Un hombre de 68 años resultaba herido de gravedad al ser golpeado varias veces en la cabeza con un martillo. ¿La autora de la agresión? Su propia hija, de 23 años de edad, ante la atónita mirada de los transeúntes que paseaban por el céntrico barrio de la capital.